Todo empieza con una gran visión, la del maestro Vasconcelos, quien comprendía perfectamente que para reconstruir un pueblo después de años de revuelta, la educación era esencial, el priorizó algo que es de vital importancia que es la filosofía, comprendía que es a través del razonamiento, el cuestionarse el ¿por qué? de las cosas se podría llegar a un pensamiento más elevado capaz discernir y crear nuevas situaciones, de adentrarse en otros campos de la ciencia, e integrar a México a los cambios que sucedían en el mundo tras eventos como la Primer Guerra Mundial.
El país necesitaba ser alfabetizado y llevar la cultura al medio rural, así como a las ciudades, la cultura debía llegar de una forma clara y simple de tal forma que todos la pudieran entender, se realizaron murales en los edificios públicos aunque desgraciadamente en muchos de ellos la afluencia del pueblo común no era la que se podía esperar, por lo que se construyeron hermosos complejos como el mercado Abelardo L. Rodríguez que fue muestra magnifica de como acercar la cultura al pueblo común y corriente en un lugar al que este siempre asiste que es el mercado, un mercado que ademas de presentar esta grandiosidad de obras contaba con su teatro.
Trabajo de Roberto Montemayor en el actual Museo de las Constituciones |
Roberto Montenegro y algunos artistas poco conocidos salidos de la Academia de San Carlos serían los encargados de comenzar este movimiento artístico, ideológico y político que se convertiría en símbolo mismo del país a tal grado que se llegara a decir que México era tres cosas: "Los murales, el tequila y los mariachis".
Sería tiempo después cuando Vasconcelos mandaría a llamar a aquellos artistas mexicanos patrocinados por el gobierno en Europa y aparecerían las grandes figuras del muralismo mexicano, Diego Rivera, José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros. Pintura como la de Diego se veía muy influida por las técnicas y estilos de Europa así que lo primero que trato de pintar sería el fresco al estilo europeo pero entendería entonces que las características y situación de México eran otras y comenzó a crear una serie de obras que narrarían la historia de México, la herencia de sus culturas prehispánicas y el triunfo de la clase obrera, la clase obrera del comunismo ruso.
Un Kremlin en la Quinta avenida |
Es David Alfaro Siqueiros una personalidad rebelde, luchadora, idealista, a tal grado que estuvo en prisión, exiliado e incluso voluntario de la guerra civil española, militante del Partido Comunista de Mexicano, entre algunas otras cosas, situaciones que influirían en su trabajo artístico, lleno de dinamismo, el bloque de colores intensos, de una mirada que se vuelve de lucha, maestro de la perspectiva y el movimiento, cuyas pinturas envuelven el espacio y no pueden entenderse en un estado estático si no de movimiento, en un estado en el que pareciera uno que la pintura sale de los muros y se materializa en el espacio tomando una parte de ella.
El maestro Orozco, pintor de la lucha, la opresión y la esperanza del cambio, la purificación la deshumanizada sociedad de una época de lo industrial, desde Nueva York hasta México y pasasndo por California, los peligros sobre la humanidad el fantasma de la guerra, violento y dinámico a través del arte más puro y derecho para que el pueblo lo vea y lo confronte.
LA PLAZA GARIBALDI
Sin duda el lugar más famoso para escuchar al mariachi en esta ciudad, ubicada en la zona centro ha recibido una gran inversión para buscar una transformación y mejoramiento del espacio, espacio que se ha convertido en un ghetto mal oliente, inseguro en la mitas de una zona en franca decadencia, sin embargo se ha dado una maquillada a la plaza como parte de las acciones de rescate del espacio público de la pasada administración, mas no así a sus alrededores y se ha convertido en una especie oasis pequeño en medio de la inmundicia y lugares poco recomendables, siendo un proyecto que carece de continuidad y se convierte en un hecho aislado y poco efectivo para un real rescate del abandono total en el que esta esta parte norte del centro histórico.
En el año de 1921 con motivo de las fiestas del centenario de la la consumación de la independencia se le da el nombre de "Plaza Garibaldi" haciendo honores Peppino Garibaldi quien luchara en la Revolución Mexicana, era conocida cómo "El Baratillo" que obviamente era un lugar para venta de cacharros y baratijas usadas. Y se convertiría en lugar por excelencia del mariachi debido a la introducción de estos grupo musicales en bares como el Tenampa al que Cirilo Marmolejo llevo el mariachi coculense. Hoy por hoy Garibaldi y sus alrededores por más acciones de maquillaje realizadas, son un lugar decadente de medio pelo en el que no sólo hay mariachis sino tríos norteños, y otra cantidad de agrupaciones y géneros, qué aclaro no es por despreciarlos, al contrario cómo es posible que siendo declarado Patrimonio Intangible por la humanidad, la capital del mariachi sea un arraval lleno de borrachos vomitándose por las noches, hogar de indigentes en el día?.
México a través del Palacio NacionalEn el año de 1921 con motivo de las fiestas del centenario de la la consumación de la independencia se le da el nombre de "Plaza Garibaldi" haciendo honores Peppino Garibaldi quien luchara en la Revolución Mexicana, era conocida cómo "El Baratillo" que obviamente era un lugar para venta de cacharros y baratijas usadas. Y se convertiría en lugar por excelencia del mariachi debido a la introducción de estos grupo musicales en bares como el Tenampa al que Cirilo Marmolejo llevo el mariachi coculense. Hoy por hoy Garibaldi y sus alrededores por más acciones de maquillaje realizadas, son un lugar decadente de medio pelo en el que no sólo hay mariachis sino tríos norteños, y otra cantidad de agrupaciones y géneros, qué aclaro no es por despreciarlos, al contrario cómo es posible que siendo declarado Patrimonio Intangible por la humanidad, la capital del mariachi sea un arraval lleno de borrachos vomitándose por las noches, hogar de indigentes en el día?.
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